Fata Morgana: la vida trastocada en un instante
Director: Noé Morales Muñoz
Teatro Zona de Acción presenta Fata Morgana, obra realizada con el estímulo Jalisco a Escena 2017, ganadora de la categoría Montaje de dramaturgia contemporánea de la Secretaría de Cultura de Jalisco
Un departamento con tres personas y esta pregunta: ¿qué harías si tu vecino (con quien nunca has intercambiado palabra alguna) un día llega a tu departamento y decide dejarte a su perro “solo por unos días”? Esto es Fata Morgana.
La obra escrita por Noé Morales Muñoz (con este texto ganó el Premio Nacional de Dramaturgia Tamaulipas 2015) utiliza el fenómeno de la fata morgana (un raro tipo de espejismo que hace que la gente vea enormes estructuras complejas en el cielo) para desarrollar un diálogo con el público en el Teatro Alarife Martín Casillas.
Los actores ponen el ejemplo de que cada personaje trastoca su vida por una condición inesperada y muestran en escena —en un departamento de paredes blancas, sillones rojos, una cafetera y una grabadora— a personas que no creen ni en ellas mismas: un viejo derrotado por su pasado con ganas de vivir algo diferente, una chica que pretende escapar de todo y de todos para encontrarse, y un chico con falsas esperanzas que cree que la compañía de un perro o de una turista lo liberarán del fracaso.
Me gustó porque propone algo más que solo teatro, las proyecciones en las paredes y la forma de expresarse de los actores fue lo que más me gustó. La recomiendo”
—Roberto, 24 años.
Es como muy conceptual, toda la escenografía, el trazo y las actuaciones también me gustaron. Sí la recomiendo”
—Mishell Serratos, 26 años.
El canal de comunicación de los personajes confunde al principio el rumbo de la obra: cada uno menciona lo que piensa y siente ante una situación en particular, no llegan a tener unidad para hablar de un solo tema, sino que hablan de lo que está en su subconsciente y cómo esto no los deja continuar con sus vidas.
El diseño de iluminación es una propuesta adecuada ya que transforma el pequeño cuadro donde se desarrolla la obra por medio de sombras, reflejos generando énfasis en ciertas escenas que desarrollan los actores. El diseño audiovisual que se genera en el montaje por medio de las proyecciones muestra al público otra forma de ver pequeños videos en las paredes de un departamento.
El ritmo de la obra del grupo Zona de Acción está basado principalmente en la dramaturgia, cuyo discurso puede resultar muy pesado: el texto es demasiado para los trazos que realizan los actores y es abundante en frases como “somos máquinas para sufrir decepciones” o “para aliviar una pena no siempre la verdad es necesaria”.
Al mismo tiempo está la propuesta de los actores en escena para saber quién es peor que quién; esto se desarrolla cuando ellos hablan de sus anhelos, cuando le explican al público cada cosa que hacen y por qué la hacen y cuando deciden terminar sus historias a su manera después de sufrir al mismo tiempo la misma derrota, para decidir si emprenden una nueva vida o vuelven a la anterior.