Arrullo al corazón le canta al público del teatro para bebés
:
El tercer espectáculo para bebés de A la Deriva homenajea a las canciones de cuna y confirma el interés de esta compañía por atender a estos públicos
¿Es teatro no es teatro? Hace tiempo que Susana Romo dice que ya el teatro es lo de menos: lo que esta directora ha impulsado en la compañía tapatía A la Deriva, y bautizado como teatro para bebés, conecta con familias que buscan una opción de encuentro y entretenimiento; tanto, que, en el cuarto año de trabajo con los públicos más jóvenes posibles, estrenan Arrullo al corazón, su tercer montaje con las mismas características.
Arrullo al corazón está pensado para niños de uno a tres años de edad y es un homenaje a las canciones de cuna: las que muchos papás cantaban a sus niños para que se durmieran. A la Deriva se acerca al tema con las mismas herramientas de ¿Dónde está Isabela? (2015) y Piecitos (2017), sus dos montajes anteriores, pero también con una interesante carga e motiva por las canciones que sus integrantes recuerdan de sus propias infancias y, además, con la experiencia del trabajo anterior como impulso.
“Arrullo… nos ha fusionado como equipo de trabajo; ha sido un proceso muy bonito, que fue desde investigar qué canciones nos cantaban, hasta lo que hace la música a cualquier edad”, dice Susana Romo al describir el nuevo montaje para bebés hecho en Jalisco.
Esta vez hay en escena cinco “jugadores” (en el teatro para bebés de A la Deriva, los actores se suben más bien a jugar con los niños): los tres actores de los montajes anteriores —Maetzin Vázquez, Oz Jiménez y Scarlett Garduño— están acompañados por Cristy Martínez, actriz, cantante y directora por su cuenta del espectáculo El día de Amy (2017), también para niños pequeños; y por Héctor Aguilar, pedagogo y músico que acompaña con percusiones el trabajo sobre el escenario.
Mientras que Cristy Martínez aporta su propia comprensión del trabajo musical con los bebés, Héctor Aguilar subraya el diseño sonoro del espectáculo, según Romo. “Yo había trabajado con él en Niñas de la guerra (2012), es un creativo muy importante. La música en vivo es mágica para los niños; Arrullo… no es primordialmente musical, pero la música juega un papel primordial”.
Arrullo al corazón se presenta durante febrero en el Conjunto de Artes Escénicas. Una buena idea para comprar boletos es revisar el sitio web de este foro; ponga atención a los cargos que ese teatro hace a todos sus espectáculos, por todos sus canales de venta.
Cupo pensado para bebés
Si una obra de teatro es un espectáculo que requiere esfuerzos de orden y organización, un espectáculo para bebés lo es todavía más: en el mundo y con A la Deriva, el teatro para bebés solo ofrece funciones con cupo muy limitado.
En Arrullo al corazón, son 20 bebés con su respectivo acompañante, y un máximo de 40 adultos que pueden entrar al espectáculo por su cuenta.
La compra más útil es pagar el boleto de bebé con acompañante: $180 por los dos. Si hay dos papás y van con bebé, el segundo papá puede pagar el boleto de acompañante: $100.
En todas las formas de venta, incluyendo la taquilla, el Conjunto de Artes Escénicas cobra 10% extra por la venta de boleto.
Isabela va por un récord
La aventura de Susana Romo y A la Deriva con el teatro para bebés comenzó hace casi cuatro años con ¿Dónde está Isabela?, que en una temporada a celebrarse en abril-mayo llegará a sus 100 funciones.
Para la directora, es muy importante mantener activas las dos obras anteriores a Arrullo al corazón (Piecitos, la segunda, se estrenó apenas en 2017), sobre todo porque permiten atender a niños recién nacidos.
Isabela pondrá, además, un récord importante para el país: será la primera obra de teatro para bebés que llegue a 100 funciones.